Si no lo "cuelgo" reviento

Fue en el Paris de 1948 que es aceptada, en la III Asamblea General de las Naciones Unidas, la Resolución 217, en el Articulo 19 de los Derechos Humanos donde consta la Libertad de Expresión. Son 30 artículos base para todos los países firmantes (España no fue admitida en la ONU hasta 1955). Los 30 Artículos expresan la base de las leyes fundamentales que deben adaptarse a la Constitución de cada estado democrático miembro. España la adaptó a su Constitución de 1978, teniendo el añadido de ser un pueblo que salía de una dictadura y pedía libertad. La Constitución tuvo que adaptase al momento aprobando el artículo donde se aceptaban las provincias y nacionalidades por contentar a Cataluña y el País Vasco, y una libertad de expresión cuyos límites siempre han sido discutidos por no tener ningún elemento de equilibrio ante los excesos.

España se convierte en el centro universal de las libertades. El Madrid de la movida acoge el Orgullo Gay, con más de dos millones de gais todos los años en su celebración, venidos de todo el mundo, creando movimientos de difícil aceptación, degradando la expresión gay a sus orígenes; mariconadas. Surgen los animalistas, que si uno va a los toros se acuerdan de tus muertos, pero después se comen bien cocinado el rabo. Cuando no las feministas, que por un yo que sé están prestas a enseñarnos las tetas y otras desnudeces. Los ocupas que, apoyándose en la constitución, dicen que es el Estado quien tiene la obligación de proporcionar trabajo y vivienda digna, por lo que a poco que te descuides sales un día a comprar tabaco y tu casa está ocupada, teniendo que esperar como dos años para recuperarla. LIBERTAD, convertida en libertinaje y admitida por la justicia que se apoya en la Constitución, jaleada por las ONG progresistas, tribus donde se acogen y se acomodan los "ninis" de papá que han paseado los libros en la Universidad y hoy cantan la Internacional envueltos en la bandera republicana, sin saber que fue aquella segunda república donde, de 1931 a 1939, se sucedieron 26 gobiernos por la falta de entendimiento.

Lo dicho, no fallan las ideas, fallamos las personas que distorsionamos las leyes en beneficio propio. Uno puede decir o exponer lo que le venga en gana, nuestra ley, la española, lo ampara por el derecho de expresión y de opinión, y cuando se quieren neutralizar los excesos con una ley, todos en tropel salen a manifestarse, porque así se encuentran de puta madre. La libertad de expresión, me decía hace unos días un conocido de la nueva izquierda, que es como un sentimiento, lo que le hacía libre por poder decir y hacer lo que le diese la gana, al tal extremo que me habló del sentimiento de ser o no ser, le hablé de los límites y de que su libertad termina donde empieza la mía, le hablé del equilibrio del todo para que el todo funcione, del respeto, y me respondió... me catalogó de derechas con unos conceptos retrógrados, me dijo que era una persona mayor que estaba muy alejado de la verdad de la transición verdadera, de libertades, no como la del 78 encorsetada en lo residual del nacional catolicismo.