OPERACIÓN DIANA Y ALGO MAS
El 31 de enero de 1958 se efectuó una rectificación de la línea defensiva de Sidi Ifni, y para ello se tenía previsto ocupar las cotas "D" y "E", ya que éstas ofrecían una mayor seguridad en el cierre de las probables cotas de penetración del enemigo.
La Agrupación Táctica "Norte", al mando del teniente coronel Antonio Delgado Álvarez, tenia bajo su mando el IV Tabor de Tiradores, la I Bandera Paracaidista del Ejército de Tierra y el II Tabor de Tiradores, el cual llevó a cabo un fuego de protección a esta columna.
Dos horas después del inicio de la Hora H, a las 10.30, los tiradores se reunieron ante un nutrido fuego de fusilería y ametralladoras, que provenía desde la cota "249", pero la reacción no se hizo esperar. Los tiradores, con el mayor coraje y acometividad se lanzan al ataque apoyados con fuego de morteros, y aunque el éxito estaba garantizado, la 23' Compañía tuvo dos muertos y un sargento y un tirador heridos. Aunque el enemigo resistió con dureza, la 23" Compañía los hizo poner en fuga. Este comportamiento tuvo la satisfacción de que por el mando la 23' Compañía recibió una felicitación.
Con esta operación, en la cual participó al mando de tres compañías de tiradores el comandante Alberto Arellano Carreras, se amplió la defensa de la ciudad de Sidi Ifni con un perímetro de unos 6 kilómetros, que así finalizaría hasta la entrega a Marruecos en 1969
Algunos flecos quedaron, que posteriormente hubo que resolver. Cotas (montículos) que habían que ocupar, con la temida vaguada donde se recibía el fuego enemigo hasta llegar a la cima si o si. Por lo general se formada una punta de lanza en el centro los del SMO flanco izquierdo y derecho Paracas y Legión. Terminada la Operación las fuerzas de elite regresaban a sus acuartelamientos. La Legión solía verse en su retirada con burros cargados con lo podían coger de las cábilas y los Paracas después de comer y ponerse limpios y guapos les daban un paquete de rubio y permiso para irse al cine o de putas que también habían Los del SMO quedábamos a defender la cota que nos había costado algún muerto o heridos y como premio alguna vez una lata de sardinas y un poco de agua. Cuando llegábamos a ocupar la cota (aun sin alambradas ni campos de minas) el sargento nos distribuía por pelotones y alguna vez los situaba de tal forma que por la noche oíamos ruido delante del puesto y nos poníamos a dispara, empezaba así hasta que por contagio toda la primera línea disparaba hacia delante, hasta que el o los tenientes conseguía parar el fuego. Se notaba que aquello era un ejercito poco profesional, los oficiales y suboficiales hacían lo que podían y la fuerza naval o aérea mejor no mencionarlas, estos últimos no teniendo bombas tiraban a mano bidones de gasolina con un artilugio inventado por un teniente mañoso que los hacia explosionar.
Al escribir esto siento vergüenza y una cierta rabia al leer no pocas veces que la guerra la gano España
Faltaría decir, el porque se le denomina Campaña. Es bien simple porque el dueto Franco, Carro Blanco tuvieron miedo de declarar la guerra a Marruecos, tanto que el Moro si lo hizo, si no en una proclama, si de facto poniendo su EL en territorio español
Nos quedamos pues con CAMPAÑA y no guerra, con nuestros muertos herido muertos abandonados y prisioneros que
es lo que ocurre en una GUERRA
Adolfo
He leído tu discurso y bien sabes que lo comparto íntegramente.
ResponderEliminarEn uno de mis escritos, sacaba a relucir aquello de que algunas tardes nos íbamos al cine después de volver del campo, mientras vosotros os quedabais atrincherados. Y otras cuestiones que yo calificaba de vergonzosas.
Te felicito por dejar testimonio de aquella ignorada guerra.