"IFNI 1957 - 1958. Sin memoria histórica". Entrevista al autor.


Fuente: El Rincón de Sidi Ifni

Entrevista al autor Adolfo Cano.
Abril de 2017.


Ante la próxima presentación de su libro "Ifni 1957-1958. Sin Memoria Histórica", que tendrá lugar el próximo día 12 de mayo de 2017, en la Sala Ramón Lull de la Biblioteca Municipal "Rafael Altamira" de El Campello (Alicante), ciudad en la que vive, hemos querido hacerle a Adolfo Cano, gran colaborador y mejor amigo de este Rincón de Sidi Ifni, algunas preguntas sobre el libro y sobre cómo vivió aquellos días de juventud.

¿Cuál es la razón por la que, de una forma tardía, publica un libro que trata de una guerra que este año cumple 60 años, y por otra parte olvidada o desconocida por la mayoría del pueblo español?


La razón es obvia, porque tengo 82 años, que desmontándolos me encuentro que, terminado mi Servicio Militar Obligatorio (SMO), durante el mismo participé en la nefasta Guerra de Ifni (1957-1958). Que apenas dos años después me encontraba en Alemania, y en 1961 en Paris, donde pase 15 años, hasta la muerte de Franco. Si a estos sumamos otros tantos de adaptación como autónomo en la nueva España, llegan los 65 y me jubilo.
Así de rápido es, y de forma tardía afloran los recuerdos de aquella absurda guerra, de la que salí dañado y con preguntas a las que no tenia respuestas del porqué y del cómo fue posible tamaña chapuza militar, cuando estábamos gobernados por un Régimen militarista. Es en este libro que trato de darme respuesta a aquellas preguntas. Después de más de diez años de análisis, de artículos, de exposiciones fotográficas, de conferencias, de haber sido socio fundador de la Asociación de Veteranos de Ifni del Levante Español (AVILE), fue así que tuve material para escribir el libro.
Dice haber salido dañado de aquella guerra, ¿tal vez fue herido?
No, no fui herido, salvo una rotura fibrilar en la pierna derecha por la deflagración de un mortero. Pero las heridas de guerra no todas son de sangre. En Ifni perdí la sonrisa por haber cogido una enfermedad, que un año después me hizo ser poseedor de una dentadura postiza a los 22 años. Estando en Ifni murió mi padre ‒no me dieron permiso para asistir a su entierro‒. De Ifni me traje una ulcera de estomago que se perforó en Paris en el 62. Hubo más, que relato en el libro.

Se pregunta el porqué y el cómo fue posible tamaña chapuza de logística, ¿cuál sería su reflexión sobre sus preguntas?


De nuevo tendríamos que ir a mi libro, aunque sí puedo decir que los oficiales que estaban en el territorio dependían del Alto Mando. Hicieron lo que pudieron dentro de la tragicomedia de aquella guerra.

¿Cómo fueron tratados?


Pues… la respuesta es compleja, yo llegué a Sidi Ifni ‒la capital del territorio de Ifni‒ en marzo de 1957, incorporándome en el Grupo de Tiradores de Ifni Nº 1. La situación era de absoluta tranquilidad y el trato era el propio de cuando se cumplía el SMO, con un añadido de preparación con marchas interminables por todo el territorio. En general con un trato aceptable. Otra cosa fue desde el 23 de noviembre de 1957, fecha del comienzo de la guerra. Anteriormente, en nuestras marchas tuvimos algún momento comprometido esperando ataques que no se produjeron.

El 23 de noviembre de 1957 parece ser la fatídica fecha. Inicio de lo que llama la tragicomedia de una guerra absurda. ¿Podría definir este término?


Que fue una guerra absurda, lo fue en cuanto que debíamos defendernos ante un Ejército de Liberación marroquí que ocuparon el 90% de Ifni sin apenas resistencia. Una comedia, orquestada desde Madrid, que puso en escena a cuatro comunistas como los moros malos, que según Carrero Blanco eran los que, subvencionados por la URSS, estaban incordiando entre Marruecos y España. Trágica porque se moría con las alpargatas puestas, por nuestra parte teníamos un par de botas solo para desfilar.

Se dice que las fuerzas de elite de la Legión y los Paracaidistas fueron las fuerzas que limpiaron el territorio y ganaron la guerra según algún artículo leído. ¿Puede darnos su opinión?


Es una pregunta a la que dar una respuesta es complicado o delicado. Tengo gran aprecio tanto a la Legión, como en especial a los paracaidistas.
Sí puedo decir, sin faltar a la verdad, que el territorio de Ifni, desde el 23 de noviembre de 1957, estuvo ocupado por el ejército marroquí. Nunca se limpió, como sí se hizo en el Sahara con la ayuda de Francia.

Que los cuerpos de élite estuvieron posicionados en sus acuartelamientos de la capital, participando junto a los del SMO en las Operaciones, que fueron en su conjunto “la guerra”. Mientras los del SMO participaron en las Operaciones y su acuartelamiento fue la primera línea en la montaña, primera línea establecida en defensa de Sidi Ifni. Las fuerzas de elite nunca defendieron la primera línea, salvo los primeros días del 23 al 28 ‒cinco días‒ hasta que llegaron los grupos expedicionarios y fueron retirados de la montaña.

Que las fuerzas de élite comieron y bebieron en la capital y los del SMO fuimos tratados como perros famélicos en la montaña sin ninguna higiene, con escasa comida y muy poca agua, cierto es que fueron meses lluviosos.

La guerra se perdió porque Marruecos ocupó nuestro territorio que nunca se recuperó. Siendo para algunos la 51 provincia española, aunque lo fuera por decreto y de nulo derecho para la ONU. Claro que hablo de lo que yo vi y viví de marzo de 1957 a junio de 1958.

Habla de la montaña y de la primera línea ¿podría situarnos en aquellos días en aquel lugar de la montaña?


Podría o, mejor dicho, lo intento. Ifni ‒que fue colonia española‒ está situado en la costa occidental de Marruecos, frente a las Islas Canarias, el territorio esta “ocupado” por el Bajo Atlas. Montículos y vaguadas es lo que había que defender. Sidi Ifni es la capital al abrigo del monte Bulalam. Fue el 23 de noviembre de 1957 que el Ejercito de Liberación nos atacó “casi” por sorpresa; ese “casi” nos dio tiempo para establecer una primera línea en el monte Bulalam, con las escasas fuerzas que teníamos. Los Tiradores de Ifni fuimos los que quedamos a “perpetuidad”, primero en el Bulalam y, posteriormente tras la Operación Diana, en las nuevas cotas junto a los grupos expedicionarios que vinieron a reforzarnos. La primera línea en la defensa de Sidi Ifni el 23 de noviembre, se formó a “pelo”, sin alambradas ni campos de minas para cubrir la zona, en espera de refuerzos dormíamos dos horas y dos horas guardia, cuando no a 50 m de los primeros puestos como centinela adelantado y el moro enfrente. Fueron días terribles, de escasa comida y menos agua. Cuando soplaba el Siroco veías moros por doquier y disparabas a la nada. Para “situarnos en aquellos días” haría falta incluso algo más que mi libro.

Muchas gracias Adolfo, le deseamos los mayores éxitos con su libro y le agradecemos que nos cuente en él sus experiencias durante esos días en los que se vio obligado a vivir peligrosamente.

1 comentario:

  1. Estimado Adolfo. Te ruego aceptes mi más sincera enhorabuena por tu iniciativa. Más que olvidada, la guerra de Ifni es un pasaje ignorado de nuestra historia por el pueblo español, y como nuestros gobernantes son de otra galaxia, difícil veo yo que les lleguen tus buenos deseos. Ellos, los gobernantes de ahora y de siempre están en sus cosas. Y no digamos de estos aprendices que pululan por ahí con sus algaradas callejeras.
    Te deseo como veterano que también soy, un enorme éxito. Juan

    ResponderEliminar